Budapest es una de las ciudades más bellas de Europa. Visitar la capital de Hungría debería estar en la lista de todo viajero que quiera sumergirse en la historia, arquitectura y cultura del viejo continente pero debido a su lejanía de la «Europa clásica» (Madrid, Paris,Londres, Roma….) los viajeros prefieren dejar Budapest para otra ocasión.
Ahora que hemos visitado la ciudad mi consejo sería que no se la pierdan, que les va a volar la cabeza en todo sentido. Manu había ido con amigos en 2016, poco tiempo después de conocernos y no dejaba de insistirme con volver, así que como parte de nuestras vacaciones de verano nos fuimos unos días para allá.
Hay de todo para todos los gustos : edificios elegantes, arquitectura descomunal y vestigios de épocas glamorosas. Todo se mezcla con los recuerdos de las 2da guerra mundial, la música, los bares llenos de jóvenes que destilan energía a la noche dorada de Budapest.
Una de las cosas que resume lo que es Budapest son los Ruina Bar : generalmente ubicados en el antiguo barrio judío, estos bares fueron abiertos en edificios en ruinas y con una decoración bien particular. Atraen a muchísimas personas que desean escuchar buena música y tomar algo en un lugar único. Se puede intervenir «artísticamente» las paredes.
Yo siempre digo «el tiempo que tengan» no se pierdan de visitar algo porque no les quedan muchos días para hacerlo. Ahora que conozco la ciudad diría que al menos 4 días enteros, pero nosotros lo hicimos en 2 y medio.
Hay muchísimo para ver por lo que podemos dividir la ciudad en 2. Cada lado del Danubio es bien diferente y está lleno de lugares interesantes a explorar.
El río, que separa en dos partes de la ciudad, tiene 230 metros de ancho en su punto más estrecho en Budapest. Pest se encuentra en la planicie de la Gran Llanura, mientras que el terreno en Buda es muy accidentado.
El terreno de Pest se levanta con una ligera pendiente hacia el este, por lo que las partes más orientales de la ciudad están a la misma altura que las pequeñas colinas de Buda, en particular la colina Gellért y Monte del Castillo.
Actividades en Pest :
Actividades en Buda :
Las medias estaciones (primavera y otoño) siempre son agradables, con menos turistas e incluso precios más accesibles – si bien no es una ciudad muy cara- Navidad puede ser una buena idea si quieren ver la ciudad bajo la magia navideña aunque se tendrán que abrigar bien.
Nosotros fuimos en pleno verano y lo disfrutamos un montón aunque el calor es un poco agobiante. En cuanto al clima turístico fue un poco extraño ya que no había mucha gente a causa del Covid.
Aunque Hungría pertenece a la Unión Europea no usan el euro. La moneda oficial son los florines húngaros, 1€ equivale a unos 360 florines (HUF) y pueden cambiar en las casas de cambio o sacar del cajero directamente evitando el cambio en el aeropuerto. Sino pagan con tarjeta aunque no aceptan en todos lados.
Quiero aclarar que con buen calzado es fácil recorrer la ciudad a pie, podrán disfrutar de cada rincón de la misma y sacar muchas fotos pero sí prefieren tomar el transporte en común, metro, bus o el tram son buena opción por casi 1€ el trayecto 350HUF.
Nosotros salimos del aeropuerto París-Beauvais y llegamos a el aeropuerto Internacional de Budapest Ferenc Liszt. Desde allí fuimos en bus 200E, hasta el final del recorrido: la parada de metro Köbánya-Kispest (línea M3) y de allí tomamos otro bus hasta el hotel porque el metro no funcionaba a esa hora del domingo. Fue muy fácil y a la vuelta como era día de semana usamos el metro.
La linea de bus 100E que te lleva del aeropuerto al centro directamente no funcionaba (900 HUF – 3€)
La oferta hotelera es enorme y hay de todo. Nosotros elegimos el T62 Hotel, uno de los más lindos hoteles en los que hemos estado en Europa. Desayuno variado, habitaciones modernas y todo decorado con mucha onda. Bar y recepción las 24h lo que es un plus si llegan tarde a la ciudad.
La comida es riquísima y variada, hay muchos platos con carne. Como es una ciudad capital encontrarán desde opciones clásicas como hamburguesas, pizzas, pastas hasta los platos típicos de Hungría en lugares más o menos adaptados para los extranjeros.
Con hambre no se van a quedar ya que hay de todo. Otra idea si se quiere gastar menos es ir a los supermercados tipo Lidl cuyos precios son «bbb».
Les voy a escribir toda una entrada dedicada a lo que comimos en Budapest, consejos y buenos planes… pero no pueden ir y no comerse el Gulash o Goulash, un estofado de ternera con mucho pimentón picante, típico de Budapest.
Hasta la próxima!